- Este centro, perteneciente a la localidad costera de Ribeira, ha efectuado un trabajo en el que denuncian el uso y abuso de plásticos, muchos de los cuales acaban en el mar, convirtiéndose en una importante fuente de contaminación.
- Reparan especialmente en el impacto ambiental y económico de esta problemática, ya que muchas familias de la localidad viven de los ingresos que les reporta el mar
- Por su parte, un océano contaminado sesga la vida de los peces y muchas veces los alimentos marinos llegan a nuestras mesas con gran cantidad de microplásticos cuyos efectos sobre la salud humana están todavía por determinar.
Cerceda, a 26 de julio de 2019.- Con motivo de la convocatoria de premios correspondiente al programa educativo “Recíclate con Sogama” 2018-2019, en el que se valoraban las obras de arte realizadas con materiales de desecho por parte de los 25 centros que participaron en esta iniciativa, cabría aludir a la presentada por el CEIP Plurilingüe de Artes, perteneciente al ayuntamiento de Ribeira, en la provincia de A Coruña.
Con su trabajo, coordinado por la profesora Alba Comojo Ordóñez, pretendían llamar la atención sobre la localidad marinera en el que habitan los alumnos y alumnas de este colegio, cuyas familias trabajan en el mar, siendo su sustento el pescado que capturan y que luego ponen a la venta.
La preocupación por la contaminación marina derivada de los plásticos es, si cabe, todavía mayor en los municipios de costa, dada su dimensión económica y medioambiental. Es por ello que la comunidad educativa del centro ribeirense decidió gestar una obra de denuncia y protesta para que se abandone el plástico de usar y tirar y se opte por otras alternativas más sostenibles, apelando al mismo tiempo a la concienciación ciudadana, ya que el mar no es un vertedero. Así los aseguran en su proyecto: “Nosotros no queremos un mar de plásticos, lleno de contaminación, en donde los peces mueran cada día por la acción humana o que se intoxiquen con microplásticos que luego comemos”.
Consideran que en la práctica de las tres erres (Reducir, Reutilizar y Reciclar) reside la clave. Es decir, consumir de forma responsable, adquirir únicamente lo necesario, priorizar las compras a granel, llevar la bolsa de casa al mercado y evitar el desperdicio alimentario.
El mar es fuente de vida y de ingresos para muchas familias, y el pescado es un ingrediente básico de la alimentación humana.
En la elaboración de la obra han utilizado desechos tales como tapones y bolsas plásticas, cápsulas de café, chapas de refrescos, cartón y botes de plástico de champú y suavizante, entre otros.
Saludos, Departamento de Comunicación