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Con esta jornada se pretende concienciar a la población sobre la necesidad de minimizar el consumo de bolsas plásticas de un solo uso y optar por las reutilizables
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Se estima que, a nivel global, se consumen cada año alrededor de un billón de bolsas de plástico, con la particularidad de que cada una puede tardar más de 150 años en degradarse
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Los plásticos causan daños letales en una amplia variedad de especies marinas y suponen un riesgo para la salud humana
Cerceda, a 3 de julio de 2024.- Hoy se conmemora el Día Internacional Libre de las Bolsas de Plástico, una fecha instaurada en 2017, cuando la Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó una resolución que instaba a los países a tomar medidas para reducir su consumo.
Se calcula que una bolsa de plástico puede tardar más de 150 años en degradarse. Sin embargo, es importante destacar que la descomposición no significa que desaparezcan por completo, sino que se fragmentan en microplásticos que pueden persistir durante cientos de años.
Según estimaciones de la Asociación Internacional de Residuos Sólidos (ISWA), se consumen alrededor de un billón de bolsas de plástico cada año a nivel global. No obstante, estas cifras pueden variar dependiendo de la región y el país.
La creciente contaminación causada por el uso excesivo de plásticos representa un serio desafío a nivel mundial, generando impactos negativos en el medio ambiente, la economía, la sociedad y la salud. Si no se toman medidas eficaces y necesarias para revertir la situación actual, se espera que la cantidad de residuos plásticos que ingresan a los ecosistemas acuáticos aumente significativamente, pasando de alrededor de 9 a 14 millones de toneladas por año que se generaban en 2016, a una proyección de 23 a 37 millones de toneladas por año para el año 2040.
Los plásticos suponen el 85% de la basura marina y causan daños letales en una amplia variedad de especies marinas. A medida que se descomponen, liberan microplásticos y sustancias tóxicas que contaminan el agua y los sedimentos, afectando a las cadenas alimentarias marinas. Los microplásticos también pueden transportar organismos patógenos y causar cambios genéticos, inflamación y alteraciones en el comportamiento y el crecimiento de los organismos marinos, poniendo en peligro su reproducción, supervivencia y funcionamiento.
En febrero de 2022, representantes de los 175 países participantes en la Asamblea de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (UNEA por sus siglas en inglés), celebrada en Nairobi (Kenia), acordaron el primer tratado internacional jurídicamente vinculante contra la contaminación por plásticos Este acuerdo histórico supone que el Comité Intergubernamental de Negociación (CIN) relativo a la contaminación por plásticos se comprometía a abordar las maneras de promover la producción y el consumo sostenibles del plástico mediante, entre otras medidas, el diseño de productos y la gestión ambientalmente racional de los desechos, incluso a través de enfoques de eficiencia de recursos y de economía circular.
Fuente: diainternacionalde