- La instalación, con capacidad para gestionar 15.000 t/año de FORSU y otras 7.000 t de material estructurante, producirá alrededor de 6.000 t/año de compost
- La planta vilanovesa dará servicio a 26 ayuntamientos (326.846 habitantes) e integrará las distintas fases del proceso de compostaje de los residuos orgánicos
Cerceda, a 5 de diciembre de 2022.- Las obras correspondientes a la futura planta de biorresiduos que Sogama ubicará en Vilanova de Arousa (Pontevedra), concretamente en el polígono industrial de Baión, avanzan a buen ritmo, previendo que la instalación entre en funcionamiento durante el tercer trimestre del próximo año.
El presidente ejecutivo de esta empresa pública, Javier Domínguez, y el alcalde de la localidad, Gonzalo Durán, visitaron a mediados del pasado mes el terreno en el que se levantará esta infraestructura, cuya obra y puesta en marcha fue adjudicada por 15,1 M€.
Con carácter previo a los primeros trabajos de acondicionamiento del terreno, que ocupa siete parcelas (sumando éstas una superficie de 20.000 m2), por las que la Sociedad pública efectuó un desembolso de 1,5 M€, resultó necesario tramitar la Autorización Ambiental Integrada (AAI), aparejada a un complejo proceso administrativo, así como la correspondiente licencia urbanística municipal y otros permisos para poder acometer una obra de estas características.
La instalación, con capacidad para gestionar 15.000 toneladas anuales de materia orgánica contenida en los residuos municipales (FORSU) y otras 7.000 toneladas de material estructurante (podas y restos de madera), producirá alrededor de 6.000 toneladas/año de compost, cuyo destino será el sector de la agricultura y la jardinería, en sustitución de los fertilizantes artificiales.
La planta vilanovesa dará servicio a 26 ayuntamientos (326.846 habitantes) e integrará las distintas fases del proceso de compostaje de los residuos orgánicos recibidos en la misma: desde el pretratamiento y la fermentación, hasta la maduración y el almacenamiento, así como los correspondientes tratamientos de aire y de aguas, haciendo uso en todo momento de las últimas tecnologías disponibles, tanto de procesado como de control de olores y ruido.
Asimismo, la energía necesaria para la operativa industrial procederá de fuentes renovables, fundamentalmente de paneles solares, contribuyendo de esta forma a la lucha contra el cambio climático.
DESPLIEGUE DE 17 INSTALACIONES PARA LA VALORIZACIÓN DE FORSU
A fin de ayudar a los ayuntamientos en el cumplimiento de sus obligaciones legales en relación a la valorización de la fracción orgánica contenida en los residuos urbanos (FORSU) mediante su transformación en compost, la planta de biorresiduos de Vilanova de Arousa, junto con la de Cervo (Lugo), la de Verín (Ourense) y la de Cerceda (A Coruña), ya en funcionamiento, contarán con el apoyo de 13 plantas de transferencia (6 de nueva construcción y 7 de adaptación) que dispondrán de un punto de trasvase para la materia orgánica. Serán un total de 17 instalaciones, a las que se destinará una inversión superior a 40 millones de euros, y con las que se dará cobertura a la mayor parte de los municipios adheridos a Sogama, propiciando que éstos cuenten con una planta de biorresiduos o de transferencia a menos de 50 km de distancia.
Tal y como manifestó Javier Domínguez durante su reciente visita al polígono de Baión “A pesar de la grave crisis de materiales que estamos sufriendo en Europa debido al actual contexto geopolítico y el desorbitado precio de los suministros y servicios, sacaremos adelante esta planta, que marcará un antes y un después en la gestión de los residuos municipales en la provincia al incrementar la aportación al reciclaje por parte de los pontevedreses”, a lo que añadió que “como brazo ejecutor al servicio de la Xunta, ponemos a disposición toda nuestra ingeniería, medios, capital humano y esfuerzo para que la red de infraestructuras para la valorización de la materia orgánica esté a disposición de los concellos en plazo y forma”.
La obra de la planta de Vilanova cuenta con una cofinanciación de los Fondos FEDER como parte de la respuesta de la Unión Europea a la pandemia de la Covid-19, toda vez que repercute en la protección del medio ambiente y, en consecuencia, en una mayor calidad de vida.
Saludos, Departamento de Comunicación