Con esta campaña, enmarcada en el Día Mundial del Medio Ambiente, Sogama pretende ayudar a los ciudadanos a retomar los buenos hábitos previos a la crisis sanitaria del COVID-19 e incluso a reforzarlos para avanzar en la senda de la sostenibilidad.

Durante la etapa de confinamiento, y debido a la imperiosa necesidad de distanciar en el tiempo la compra de productos básicos, se priorizó la adquisición de artículos sobreenvasados con el fin de garantizar su correcta conservación.

Una vez que vamos caminando hacia la normalidad, deben imponerse las buenas prácticas orientadas a la reducción de la producción de basura, prescindiendo de los envases y embalajes superfluos.

Buenas prácticas:

•  Lleva tu propia bolsa reutilizable a la compra (de tela, de rafia natural, una cesta) o bien el tradicional carro. La bolsa de plástico se utiliza una media de 15 minutos, pero puede tardar siglos en degradarse en el entorno.
•  En casa y fuera de casa, opta por botellas de agua rellenables, preferiblemente de acero inoxidable o vidrio.
•  Rechaza las pajitas plásticas (las hay de acero, bambú o papel), así como  los platos, vasos y cubiertos fabricados con plástico. En 2021 estarán prohibidos en la UE.
•  Da preferencia a los productos comercializados a granel y, en la medida de lo posible, elige los envasados en cartón. Para almacenar los alimentos, mejor el vidrio y las latas (de acero o aluminio). Descarta bolsas, papel film y recipientes plásticos.
•  No olvides que los microplásticos también están presentes en la composición de los cosméticos y otros artículos de higiene.
•  Elige, siempre que puedas, productos fabricados con materiales biodegradables. Las alternativas son numerosas: desde peines de madera hasta esponjas de celulosa.
•  Prioriza las pinzas de madera para tender la ropa y procura prescindir de las cápsulas de café.
•  A la hora de regalar, mejor objetos que no contengan plásticos y estén fabricados con materiales reciclados.
•  En fiestas y celebraciones, evita el confeti plástico, así como los globos. Los tradicionales de poliuretano pueden permanecer más de 400 años en la naturaleza y, los de látex, si bien son biodegradables, pueden tardar años en degradarse si llegan al mar. Y, en contacto con el aire, hasta 2 ó 3 meses.
•  Recuerda separar correctamente los residuos en el hogar y depositarlos en los contenedores correspondientes para propiciar su reciclado y, por tanto, su transformación en nuevos productos. De esta forma contribuirás a ahorrar energía y materias primas.