- Una vez formalizado el convenio de adhesión a la planta de compostaje de Sogama en Cerceda, el Ayuntamiento efectuó la primera entrega el pasado 20 de abril
- Tras la correspondiente caracterización, el 97,63% de los residuos se catalogaron como orgánicos y asimilables, es decir, “propios”, mientras que el 2,37% restante correspondía a “impropios”
- Sogama califica de “sobresaliente” la calidad del material entregado por Cabana y confía en que la implicación ciudadana vaya todavía a más
Cerceda, a 1 de mayo de 2022.- El Ayuntamiento de Cabana de Bergantiños (A Coruña) se estrena con éxito en la recogida selectiva de la materia orgánica a través del quinto contenedor, de color marrón.
Una vez formalizado el convenio de adhesión a la planta de compostaje industrial de Sogama, sita en Cerceda, el pasado 20 de abril efectuó la primera entrega en esta instalación, procediendo la empresa pública a la caracterización de los desechos recibidos a fin de comprobar la calidad de los mismos. Esta primera prueba fue superada con nota, ya que el 97,63% correspondía a la fracción orgánica y asimilables, es decir, “propios”, y únicamente el 2,37% restante a la inorgánica o “impropios”, esto es, materiales que, dada su naturaleza, deberían haber sido depositados en otros contenedores de recogida selectiva.
De esta forma, Cabana se suma a los excelentes resultados obtenidos por otros ayuntamientos que utilizan los servicios de la planta de Sogama, como son Carballo, Laracha, Santa Comba y Cerceda.
La empresa pública se muestra convencida de que esta primera evaluación, que podría calificarse de “sobresaliente”, servirá de incentivo para que el vecindario de Cabana se implique todavía más en la segregación de los residuos en origen y correcto depósito de los mismos en los contenedores correspondientes, garantizando, en el caso de la fracción orgánica, su posterior transformación de compost, un fertilizante natural de alta de calidad para el sector de la agricultura y jardinería.
Es preciso recordar que la Ley gallega de residuos, siguiendo fielmente las directrices europeas, contempla el 31 de diciembre de 2023 como fecha límite para que los ayuntamientos, que son quienes tienen las competencias en la gestión de los residuos municipales, implanten la recogida diferenciada de la materia orgánica a través del contenedor marrón. Sin embargo, la nueva Ley estatal de residuos y suelos contaminados para una economía circular, que entró en vigor el pasado 10 de abril, únicamente da de plazo hasta el próximo 30 de junio para los ayuntamientos con una población superior a 5.000 habitantes.
TEJIENDO UNA RED DE INFRAESTRUCTURAS
A fin de ayudar a los entes locales a cumplir con sus deberes legales, la Xunta ha diseñado una red de infraestructuras para la valorización de la materia orgánica que se encargará de ejecutar Sogama y a la que destinará una inversión de 40 millones de euros.
Esta red estará conformada por un total de 17 instalaciones (4 plantas de biorresiduos, una por provincia: Cerceda -ya en funcionamiento-; Cervo, en Lugo; Vilanova de Arousa, en Pontevedra; y Verín, en Ourense, así como 13 plantas de transferencia a las que se dotará con una tolva específica para el trasvase de la materia orgánica). El objetivo último es que la práctica totalidad de los ayuntamientos adheridos a Sogama (295 en total) dispongan de una planta de estas características a menos de 50 kilómetros de distancia.
Saludos, Departamento de Comunicación