- Así lo manifestó Marián Sanmartín, concejala de Medio Ambiente del ayuntamiento de Marín (Pontevedra), en el programa radiofónico Ecovoz.
- Si bien los esfuerzos del ente local se han venido centrando en la concienciación de la población en torno a la recogida selectiva de distintas fracciones de residuos, lo cierto es que el compostaje está calando con fuerza.
- Tras haber repartido 100 compostadores en una de las parroquias, la demanda creció exponencialmente. A estos se sumaron otros 300 y todavía disponen de una partida de 100, pendientes de entregar tras el paréntesis impuesto por el estado de alarma (Covid-19).
Cerceda, a 19 de mayo de 2020.- La concejala de Medio Ambiente del concello de Marín (Pontevedra), Marián Sanmartín, se muestra convencida de que la protección del medio ambiente constituye una prioridad para el bienestar de las actuales y futuras generaciones, y que la colaboración ciudadana debe comenzar por cuidar el entorno más inmediato, siendo la correcta gestión de los desechos urbanos un aspecto clave.
En una entrevista concedida al programa radiofónico Ecovoz (Radio Voz Galicia), Sanmartín manifestó que, en materia de residuos, los esfuerzos del ente local se han venido centrando especialmente en la formación y concienciación de los vecinos respecto a la correcta segregación de los desechos en origen y su posterior depósito en los contenedores adecuados para propiciar su reciclaje. No obstante, precisó que, a día de hoy, el compostaje de la materia orgánica está calando con fuerza y el programa desarrollado por el ayuntamiento de Marín está resultando muy exitoso.
EL COMPOSTAJE, EN LÍNEA ASCENDENTE
Aunque comenzaron tímidamente con la distribución de 100 compostadores a otras tantas viviendas de la parroquia de Pardavila, “cada vez eran más las familias que demandaban un recipiente de estas características para elaborar su propio abono”. Posteriormente, distribuyeron otros 300 compostadores y ahora están pendientes de repartir otros 100; una acción que quedó truncada por el decreto del estado de alarma, pero que retomarán en cuanto resulte posible.
Marián Sanmartín indicó que, a fin de garantizar la correcta operativa por parte de los usuarios en el ámbito del autocompostaje, estos reciben previamente un pequeño curso presencial en el que un técnico les explica la dinámica a seguir: desde la propia ubicación del compostador, que debe estar en contacto directo con la tierra para facilitar la entrada de microorganismos descomponedores, hasta la relación de materiales que deben y no deben depositarse en el mismo, así como el control de parámetros de gran importancia tales como el oxígeno, la humedad y la temperatura.
Las motivaciones que llevan a las familias a participar en esta iniciativa son muchas: desde la oportunidad de gestionar sus propios residuos orgánicos, evitando el traslado de los mismos a los contenedores verdes genéricos, hasta razones de comodidad y la oportunidad de elaborar su compost, que utilizan luego como fertilizante natural en sus jardines y huertos.
La responsable del área de medio ambiente de Marín considera que ha llegado el momento de actuar y visualizar el planeta como lo que es, formando parte de nuestra vida y tomando conciencia de que, si lo maltratamos, atentamos contra nuestra propia existencia.
Confía en que los más pequeños sigan llevando a cabo una tarea educativa, ya que son los verdaderos embajadores de la sostenibilidad y los que dan lecciones en sus casas sobre cómo preservar el medio ambiente.
Saludos, Departamento de Comunicación