- A fin de aportar su grano de arena, las profesoras de este centro, adscrito al programa “Recíclate con Sogama”, decidieron ponerse manos a la obra y, con el plástico que utilizan en las aulas para distintas actividades, así como con el velcro y telas que encontraron en sus casas, consiguieron elaborar 150 mascarillas que han repartido de forma prioritaria en residencias de ancianos.
- Aseguran echar mucho de menos a sus pequeños, a los que siguen instruyendo y animando en la distancia para que la ilusión del reencuentro no decaiga.
Cerceda, a 14 de abril de 2020.- El colegio Fonte Escura de Vigo es uno de los 25 centros que este curso participa en el programa “Recíclate con Sogama”. Su trabajo, tesón y dedicación no tiene límites, como tampoco los tiene la profesionalidad, sensibilidad y solidaridad de sus profesoras. A diario forman y atienden a un alumnado muy diverso en el que se integran pequeños con diversas discapacidades, tanto físicas como intelectuales, así como otros con distintas problemáticas familiares y de socialización. Son unas auténticas heroínas que se dedican en cuerpo y alma a estos niños y niñas que necesitan todo su apoyo y afecto para ir creciendo con la mayor seguridad posible y abrirse paso al futuro.
En esta etapa de confinamiento que nos ha tocado vivir como consecuencia de la pandemia del COVID-19, confiesan echar mucho de menos a sus alumnos y se preocupan cada día por saber si se encuentran bien y animados, y si siguen estudiando y aprendiendo en la distancia.
Lamentan que distintos proyectos pedagógicos a los que dedicaban buena parte de su tiempo hayan quedado en “stand by”, pero su interés, lejos de desvanecerse, se refuerza, organizando para sus pupilos tareas motivadoras que les permitan avanzar en su aprendizaje y que los mantengan entretenidos e ilusionados con su regreso a las aulas.
La conexión social ha sido siempre una de las principales cualidades de este centro, teniendo en los mayores un punto de referencia. El contacto con la residencia de Barreiro, en Vigo, era permanente y llevaban a cabo diversas actividades con un colectivo, los ancianos, que hoy es especialmente vulnerable a la pandemia.
Dada la falta de elementos de protección, especialmente al inicio de la crisis, las maestras de Fonte Escura, siempre con su extraordinaria vena solidaria, decidieron hacer uso de todo el plástico que utilizan en la escuela para diversas actividades, así como del velcro y telas que encontraron en sus casas, y elaborar un total de 150 mascarillas, de las cuales una parte fueron entregadas en residencias de ancianos a fin de ayudar a los cuidadores a protegerse mejor en un momento de escasez de recursos y otra parte al hospital de Vigo. Todo un gesto de reciclaje solidario y ejemplar.
Saludos, Departamento de Comunicación