- El reciente descubrimiento de una bolsa de plástico, totalmente intacta, en el fondo de la fosa de las Marianas, que es el punto más profundo del océano, da buena idea de que la Tierra está atiborrada de basura.
- Hay que convencer la todos de que la economía circular es atractiva, rentable, irresistible.
Cerceda, a 6 de febrero de 2019.- La presencia de plásticos en todos los rincones del planeta, incluso en los más remotos, es una prueba más de que el actual modelo de economía lineal, basada en usar y tirar los productos es insostenible. El reciente descubrimiento de una bolsa de plástico, totalmente intacta, en el fondo de la fosa de las Marianas, que es el punto más profundo del océano, da buena idea de que la Tierra está atiborrada de basura.
Ni siquiera los sistemas de tratamiento y gestión de residuos más eficientes, ni los propios sistemas de reciclaje son realmente capaces de capturar todos los envases desechables que generamos. Los plásticos, expuestos a los agentes atmosféricos no llegan la degradarse nunca por completo, liberan sustancias tóxicas, emiten gases de efecto invernadero y terminan por transformarse en microplásticos que se incorporan a la cadena trófica y llegan a nudos, a través de los alimentos y los suministros de agua.
La ONU alerta de que disponemos de tan sólo 12 años para evitar una catástrofe climática.
La excesiva presencia de productos de un sólo uso fabricados con plástico, en el cuanto de otros materiales reutilizables como el vidrio y los metales, reduce enormemente la capacidad de reciclaje de los residuos.
ES momento de dejar de lado a cultura del desechable y caminar hacia un modelo de economía circular que favorezca la reducción de la cantidad de materias primo empleadas en la fabricación de nuevos productos, la reutilización de materiales y la recuperación de recursos.
Pero para lograr este objetivo, es preciso demostrar a ciudadanos, empresas y gobiernos que el uso de productos duraderos y no desechables ofrece beneficios mayores que los derivados del uso de artículos desechables.
CINCO PROPUESTAS
El Foro Económico Mundial proponen cinco formas de descartar los artículos desechables para siempre:
1.- Invertir en reciclaje
De este modo, no sólo reduciremos el volumen de residuos, sino que lograremos recuperar una ingente cantidad de materiales con los que fabricar nuevos productos.
2.- Dejar de producir, usar y comprar artículos de un sólo uso sin sistemas de recuperación
Como consumidores, podemos optar por evitar los productos desechables sin sistemas de recuperación, como los cubiertos de plástico o las tazas de café de un sólo uso. Esto obligará a los fabricantes a reducir o eliminar su producción, sustituyéndolos por productos duraderos.
3.- Enfocarse en el rediseño de productos y envases cómo estrategia de crecimiento
Cada vez más consumidores están dispuestos a adquirir alimentos y bebidas de primera calidad envasados en vidrio y plásticos duraderos, pagando un sobreprecio. La fabricación de envases duraderos requiere más energía y recursos que la creación de los desechables. Pero su utilización durante un largo período de tiempo hace que los costes ambientales y económicos sean inferiores.
4.- Innovar para el futuro del consumo mirando al pasado
Algunos viejos hábitos de comienzos del siglo XX recobran plena vigencia en estos momentos. Es el caso de los envases de vidrio retornables.
5.- Construir un movimiento de economía circular centrado en la abundancia y la prosperidad.
Para que el cambio de modelo de economía lineal al de economía circular sea posible, es necesario convencer a todos los agentes intervinientes de que los productos duraderos son tan prácticos, económicos y fáciles de usar como los desechables. No basta con vender la idea de que hacemos el correcto; hay que convencer a todos de que la economía circular es atractiva, rentable, irresistible.
Fuente e imagen: Foro Económico Mundial
Saludos, Departamento de Comunicación