- En el mismo se destacan los impactos crecientes e irreversibles del cambio climático, que afecta a los glaciares, los océanos, la naturaleza, las economías y las condiciones de vida de las personas.
- El trabajo documenta también cómo la pandemia ha impedido la monitorización de estos cambios a través del sistema de observación global, afectando a la calidad de los pronósticos y otros servicios meteorológicos, climáticos y oceánicos.
- Los expertos indican que todavía es posible cerrar la brecha de emisiones, pero esto requerirá una acción urgente y concertada de todos los países y en todos los sectores.
Cerceda, a 22 de septiembre de 2020.- Tras una disminución temporal de las emisiones como consecuencia del bloqueo y desaceleración económica derivada del COVID-19, las concentraciones de gases de efecto invernadero en la atmósfera continúan aumentando. Se espera que el mundo experimente sus cinco años más cálidos registrados, no estando en el camino de cumplir los objetivos acordados para mantener el aumento de la temperatura global muy por debajo de 2°C o en 1,5°C por encima de los niveles preindustriales.
Así se recoge en un nuevo informe de múltiples agencias de organizaciones científicas líderes, Unidos en la Ciencia 2020 , donde se destaca los impactos crecientes e irreversibles del cambio climático, que afecta a los glaciares, los océanos, la naturaleza, las economías y las condiciones de vida de las personas, percibiéndose también a través de los peligros relacionados con la sequía o las inundaciones.
Asimismo, el trabajo documenta cómo el COVID-19 ha impedido la monitorización de estos cambios a través del sistema de observación global, afectando a la calidad de los pronósticos y otros servicios meteorológicos, climáticos y oceánicos.
El informe Unidos en la Ciencia 2020, el segundo de una serie, está coordinado por la Organización Meteorológica Mundial (OMM), con aportes del Global Carbon Project, el Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático, la Comisión Oceanográfica Intergubernamental de la UNESCO, el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente. y la Met Office del Reino Unido.
URGE CERRAR LA BRECHA DE EMISIONES
La acción de transformación ya no puede posponerse si se quieren cumplir los objetivos del Acuerdo de París. Los expertos indican que todavía es posible cerrar la brecha de emisiones, pero esto requerirá una acción urgente y concertada de todos los países y en todos los sectores.
El cambio climático inducido por el hombre está afectando a los sistemas de sustento de la vida, desde la cima de las montañas hasta las profundidades de los océanos, lo que lleva a un aumento acelerado del nivel del mar, con efectos en cascada para los ecosistemas y la seguridad humana.
Las capas de hielo y los glaciares de todo el mundo han perdido masa. Entre 1979 y 2018, la extensión del hielo marino del Ártico ha disminuido durante todos los meses del año. El océano global se ha calentado sin cesar desde 1970 y ha absorbido más del 90% del exceso de calor en el sistema climático. Las olas de calor marinas se han duplicado en frecuencia y se han vuelto más duraderas intensas y extensas, lo que da lugar a eventos de blanqueamiento de coral a gran escala. El océano ha absorbido entre el 20% y el 30% del total de emisiones antropogénicas de CO2 desde la década de 1980, lo que ha provocado su mayor acidificación.
Se estima que el cambio climático aumentará el número de regiones con estrés hídrico y agravará la escasez en regiones que ya lo padecen.
Fuente: ONU Medio Ambiente
Imagen: Pixabay