- Insta a la Comisión a adoptar medidas legislativas antes del verano (en concreto del mes de julio).
- La pretensión última es reducir la cantidad de basura electrónica y facilitar a los consumidores opciones sostenibles, ya que el corto ciclo de vida de algunos dispositivos conlleva la producción de más residuos.
- En 2016, la basura electrónica en Europa alcanzó los 12,3 millones de toneladas métricas, equivalentes a 16,6 kilos por habitante.
Cerceda, a 3 de febrero de 2020.- El pasado jueves, el Parlamento Europeo instó a la Comisión a adoptar medidas legislativas antes del verano (en concreto del mes de julio) a fin de hacer realidad el cargador único para los dispositivos electrónicos portátiles.
La pretensión última de esta iniciativa es reducir la cantidad de basura electrónica y facilitar a los consumidores opciones sostenibles, ya que el corto ciclo de vida de algunos dispositivos conlleva también la producción de más residuos.
La resolución fue aprobada con 582 votos a favor, 40 en contra y 37 abstenciones, y en la misma se contempla que, sin obstaculizar la innovación, la CE debe garantizar que el marco legislativo aplicable a un cargador común es verificado regularmente para tener en cuenta los avances técnicos. En este sentido, los eurodiputados inciden en que la investigación y la innovación son fundamentales para mejorar las tecnologías existentes y desarrollar otras nuevas.
El Parlamento también reclama a la Comisión medidas para asegurar la interoperabilidad de los distintos cargadores inalámbricos con diferentes dispositivos móviles; el estudio de iniciativas legislativas para aumentar el volumen de cables y cargadores recogidos y reciclados en los Estados miembros; y garantizar que los consumidores no sigan obligados a comprar un nuevo cargador con cada dispositivo nuevo.
Según el PE, esta estrategia deberá desplegarse en paralelo al cargador común y sin llevar aparejados precios más altos.
ESCENARIO
Se calcula que los residuos electrónicos representan alrededor de 50 millones de toneladas métricas al año en el mundo, lo que supone una media de 6 kilos por persona. En 2016, la basura electrónica alcanzó en Europa los 12,3 millones de toneladas métricas, equivalentes a 16,6 kilos por habitante.
La directiva de 2014 sobre equipos radioeléctricos ya reclamaba el desarrollo de un cargador único para todos los modelos de móvil, tabletas, libros electrónicos y otros dispositivos portátiles, y también daba a la Comisión competencias para impulsar este objetivo a través de un acto delegado.
El enfoque de la Comisión, que se ha limitado a “animar” a la industria a avanzar hacia el cargador único resulta, resulta insuficiente para el Parlamento. Durante el debate del pasado 13 de enero, la Comisión destacó que sí se habían producido avances: mientras en 2009 había más de treinta tipos de cargador, en la actualidad hay principalmente tres.
En su programa de trabajo para 2020, que presentó el 29 de enero, la Comisión Europea se compromete a legislar en este ámbito durante el tercer trimestre de 2020.
Fuente: Parlamento Europeo
Imagen: Pixabay
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