• En su conferencia de prensa de fin de año, António Guterres reconoció que el cambio climático es una de las cuestiones en las que escasean las buenas noticias, con las emisiones globales aumentando y el mundo alejándose del objetivo de limitar el aumento de la temperatura a 1,5º C para fin de siglo.
• Advirtió que, lamentablemente, los planes climáticos se están quedando cortos, por lo que todos los países deben hacer un esfuerzo extra para reducir sus propias emisiones de carbono en esta década y para apoyar a las naciones que no pueden hacerlo por sí mismas.

Cerceda, a 20 de diciembre de 2022.- Ayer, con motivo del repaso de fin de año de la agenda internacional, el Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres, urgió, una vez más, a los líderes de todas las esferas de la sociedad a tomar medidas creíbles para mitigar el cambio climático, ya que los planes actuales son insuficientes para hacer frente a la amenaza existencial que supone el calentamiento del planeta.

En su conferencia de prensa de fin de año, António Guterres repasó una amplia variedad de temas entre los que destacó, además de la guerra de Ucrania, el cambio climático. Respecto a este último, reconoció que es una de las cuestiones en las que escasean las buenas noticias, con las emisiones globales aumentando y el mundo alejándose del objetivo de limitar el aumento de la temperatura a 1,5ºC para fin de siglo.

“Los planes climáticos nacionales se están quedando lamentablemente cortos”, advirtió, aunque reconoció que se han tomado algunas medidas importantes para transitar de la energía basada en el carbón hacia un modelo de energías renovables. “Todos los países deben hacer un esfuerzo extra para reducir sus propias emisiones de carbono en esta década y para apoyar a las naciones que no pueden hacerlo por sí mismas”, subrayó.

En este contexto, Guterres anunció que convocará una Cumbre de Ambición Climática en septiembre de 2023. “Hago una llamada a todos los líderes para que den un paso adelante: gobiernos, empresas, ciudades y regiones, sociedad civil y finanzas. Deben venir con una acción climática nueva, tangible y creíble para acelerar el ritmo del cambio”, señaló.

Se trata, tal y como explicó, de una invitación abierta, pero tiene un precio de acceso: “Y ese precio no es negociable: se debe presentar una acción climática creíble, seria y nueva, y soluciones basadas en la naturaleza que hagan avanzar la aguja y respondan a la urgencia de la crisis climática”.

“Será una cumbre sin tonterías. Sin excepciones. Sin componendas. No habrá lugar para retractores, lavados de cara ecológicos, o reempaquetadores de compromisos antiguos", remachó.

Fuente e imagen: ONU