- Así lo manifestó la secretaria general técnica de Aeversu, Belén Vázquez de Quevedo, durante una entrevista concedida al programa radiofónico Ecovoz, donde apeló a la necesidad de valorizar energéticamente la parte no reciclable de los residuos para luchar contra el uso masivo del vertedero en España, foco de insalubridad y de impacto ambiental
- Ensalzó el exhaustivo trabajo de control ambiental de las industrias que transforman los residuos no reciclables en energía y calor, con una permanente adaptación a los continuos requerimientos legales, así como la adopción de tecnologías de última generación que les permiten tener un alto grado de eficiencia
Cerceda, a 19 de febrero de 2024.- Hace 25 años que Aeversu, Asociación de Empresas de Valorización Energética de Residuos Urbanos, inició un largo y arduo camino para poner en valor la parte no reciclable de los desechos a través de su conversión en energía eléctrica y/o térmica. Aunque este proceso ya estaba entonces perfectamente instaurado en el norte de Europa, en España todavía era un desconocido, girando en torno al mismo múltiples mitos que el tiempo se ha encargado de poner en su sitio.
Belén Vázquez de Quevedo, secretaria general técnica de Aeversu, participó en el programa radiofónico Ecovoz, emitido por Radio Voz Galicia, para explicar el trabajo que lleva a cabo esta asociación, a la que están adscritas 12 industrias (11 en España y 1 en Andorra), así como la situación de la valorización energética en nuestro país; un sistema de gestión de residuos que debe seguir avanzando para luchar contra el uso y abuso del vertedero, la opción mayoritaria de tratamiento en España, y ello a pesar de que ocupa el último puesto en la jerarquía promulgada por la Unión Europea debido a su impacto negativo para el medio ambiente y la salud pública.
En este sentido, Vázquez de Quevedo puso de relieve el importante papel que desempeña la valorización energética para combatir el vertido, con la particularidad de que, a partir de la misma, se obtienen productos de importancia estratégica en la sociedad actual, como son la electricidad y el calor, y todo ello con un exhaustivo trabajo de control ambiental, de permanente adaptación a los continuos requerimientos legales y con una estrecha coordinación con las entidades europeas para estar al día, y también participar, en los debates, mensajes de futuro y adopción de las tecnologías más innovadoras que permiten a las industrias que forman parte de Aeversu ganar en eficiencia y asentarse como opciones veraces, reales y consistentes para evitar el vertedero.
Ejemplos los podemos encontrar en países como Noruega, Finlandia o Dinamarca, con tasas muy altas de valorización energética y reciclaje, situándose el vertido en mínimos.
La secretaria general de Aeversu considera que en la educación reside la esperanza de un futuro sostenible. "El modelo imperante de usar y tirar, propio de las sociedades modernas, se frena tomando conciencia del mismo, pues el entorno no es capaz de sostenerlo, habiendo una alternativa, que es la economía circular".
Señala que el cambio se percibe en las nuevas generaciones, que ya se empiezan a cuestionar el tener cosas en propiedad, siendo usuarias habituales de plataformas de intercambio y compras de segunda mano. "Ellas son los que van a transformar la sociedad", sentenció.
Saludos, Departamento de Comunicación