- Si bien la jornada por excelencia del Black Friday será el próximo viernes, 29 de noviembre, ya durante estos días se disparan las compras online y con entrega en domicilio, incrementando el transporte y, por tanto, la contaminación atmosférica
- Entre las adquisiciones más recurrentes figuran los dispositivos electrónicos, para reemplazar a otros muchos que aún están nuevos, y la moda, toda vez que la vida útil de las prendas se ha reducido a la mitad
- Algunas recomendaciones para limitar las consecuencias negativas de este evento son hacer una lista de lo necesario, poner un tope de gasto, buscar primero en comercios locales, evitar las compras online, invertir en productos duraderos y donar o reciclar los que reemplacemos
Cerceda, a 27 de noviembre de 2024.- Desde hace unos años, el Black Friday, una estrategia de venta procedente de Estados Unidos, se ha venido extendiendo en España hasta asentarse como un evento destacado en el calendario del consumo (último viernes del mes de noviembre), pues los descuentos ofertados en multitud de artículos hacen de esta jornada una oportunidad para distintos públicos.
Durante estas fechas, las compras online y con entrega en domicilio se disparan de forma exponencial, incrementando el transporte y, por tanto, la contaminación atmosférica.
Asimismo, los embalajes de nuestras compras, en los que predomina el plástico y cartón, generan un gran volumen de residuos que deben gestionarse correctamente, desbordando en algunos casos la capacidad de recogida de los propios ayuntamientos.
Entre las adquisiciones más recurrentes del Black Friday, figuran los dispositivos electrónicos, en muchas ocasiones con la única pretensión de hacerse con los de última generación, condenando a los antiguos a convertirse en residuos, y la moda. De hecho, hoy compramos más ropa que nunca y la desechamos antes, reduciendo a la mitad la vida útil de las prendas.
Según datos de la ONU, solo para producir unos vaqueros se necesitan 7.500 litros de agua, cantidad equivalente a la que una persona bebe durante 7 años.
Asimismo, el uso cada vez más extendido de fibras sintéticas hace que las prendas liberen más de medio millón de toneladas de microfibras en el océano cada año.
Datos de interés
- El Black Friday en España estima un consumo medio por persona de 220€.
- Desde 2015, las ventas del Black Friday han aumentado un 10-20% cada año, con la particularidad de que, en 2019, se incrementó la compra online.
- Los artículos más vendidos durante esta jornada son la moda (53% de las personas encuestadas), calzado y complementos (39%), electrodomésticos, aparatos electrónicos, y teléfonos móviles (35%).
Recomendaciones para reducir la contaminación del Black Friday
- Pensar antes de comprar. Hacer una lista previa de lo que necesitamos, poner un tope de gasto, comparar características de los productos más allá del precio y no permitir que la trampa de sentir que se pierden descuentos únicos nos haga adquirir lo que no precisamos.
- Priorizar comercios locales. Muchos pequeños comercios se ven obligados a ajustar sus precios en esta fecha para hacer frente a la competencia, y ello a pesar de que disponen de menos margen y tienen más dificultad para asumir los costes.
- Comprar en tienda física y reducir el impacto de las compras online. Estas últimas aumentan las emisiones del transporte, así como los residuos de productos y embalajes. Y si devolvemos lo adquirido, se incrementa el impacto ambiental, dando lugar a una mayor congestión en las ciudades y una peor calidad del aire.
- Invertir en productos duraderos y fabricados de manera responsable, premiando la calidad frente a la cantidad.
- Donar o reciclar los productos que reemplacemos. Darles una segunda vida es tan importante como reciclarlos al final de su vida útil.
Saludos, Departamento de Comunicación