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Con 50 remitidos a A Guarda, esta localidad suma 388 viviendas incorporadas al programa de compostaje doméstico. En Pazos de Borbén se han entregado 25, lo que hace un total de 375 y, en Marín, 100 unidades, por lo que cuenta ya con 727 familias compostadoras
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En total, son 1.490 hogares de los tres municipios los que, a través del autocompostaje, conseguirán reducir la producción de residuos en origen y elaborarán su propio compost
Cerceda, a 13 de junio de 2024.- Sogama ha remitido a los municipios pontevedreses de A Guarda, Pazos de Borbén y Marín nuevas partidas de compostadores a fin de que la autogestión de la materia orgánica se extienda a nuevos hogares de las tres localidades, dados sus beneficios ambientales, económicos y sociales.
A Guarda, concello a la que se ha entregado 50 compostadores, pasará a disponer de 388 viviendas adscritas al programa; Pazos de Borbén, con 25 compostadores, sumará 375 hogares; y Marín, con 100 nuevos recipientes, contará con 727 domicilios adscritos a esta iniciativa. En total, 1.490 familias conseguirán reducir la generación de residuos en origen gracias al reciclaje de los restos orgánicos, que vienen a representar en torno al 37-40% de la composición media de una bolsa de basura tipo, al tiempo que producen su propio abono.
Igualmente, la empresa pública ha enviado a los entes locales manuales didácticos de apoyo para que sean distribuidos entre los participantes. En los mismos se describe la técnica del autocompostaje, se da respuesta a las preguntas más frecuentes, así como a los errores más comunes. No obstante, la entidad también se ha puesto al servicio de los ayuntamientos para impartir cursos de formación presenciales a fin de explicar con detalle el proceso y resolver las dudas que puedan presentar los usuarios.
Los concellos quedan obligados a hacer un seguimiento de esta iniciativa para garantizar su correcto funcionamiento y deben entregar a Sogama, transcurrido 1 año desde su implantación o ampliación, el correspondiente informe.
Comodidad y eficiencia
Si bien se trata de una práctica tradicional en el medio rural, el compostaje doméstico se moderniza con la dotación de compostadores, ya que posibilitan que el sistema resulte más cómodo, higiénico y eficiente.
Con capacidad para 400 litros y fabricados con materiales reciclados y reciclables, los recipientes se colocan en el exterior de la vivienda, en una zona sombreada, protegida de las inclemencias meteorológicas y en contacto directo con la tierra para facilitar el acceso de los microorganismos descomponedores. Asimismo, los usuarios deben encargarse de controlar el oxígeno, la temperatura y la humedad, ya que son factores que influyen notablemente en el resultado final, logrando de esta forma un compost de mayor calidad.
Saludos, Departamento de Comunicación