- Esta empresa pública ha entregado al centro ourensano un compostador de 400 litros de capacidad y fabricado con materiales reciclados y reciclables a fin de que puedan fabricar compost con la materia orgánica generada.
- A fin de asesorarles en el aprovechamiento de los alimentos y minimizar la cantidad de comida que acaba arrojada al cubo de la basura, educadores de Sogama se trasladarán a este centro el próximo 17 de octubre para impartir una sesión formativa
Cerceda, a 4 de octubre de 2019.- La sección de Hostelería del IES Lagoa de Antela, en Xinzo de Limia (Ourense), se ha sumado al programa de compostaje de Sogama. Con tal fin, esta empresa pública ha suministrado al centro un compostador de 400 litros de capacidad y fabricado con materiales reciclados y reciclables. El objetivo de los estudiantes es transformar en abono la materia orgánica generada durante las clases prácticas, evitando que ésta acabe en el contenedor convencional.
Su trabajo diario entre fogones les ha llevado a reflexionar sobre el desperdicio alimentario y la forma de minimizarlo. Las cifras son preocupantes, ya que un tercio de los alimentos que se producen en el mundo para el consumo humano acaban desechados a lo largo de toda la cadena, siendo el hogar, con un 42%, el sector que más contribuye a este fenómeno.
El consumo responsable y la adquisición de los productos necesarios tras revisar la despensa y la nevera, constituye el primer gesto a adoptar.
Diferenciar entre fecha de caducidad y fecha de consumo responsable se erige también en una prioridad, ya que la confusión entre ambas puede llevar a desperdiciar artículos en buen estado. Así, la fecha de caducidad indica el momento a partir del cual un producto no es apto para el consumo humano, y la de consumo responsable se refiere al momento en que, si bien el producto puede perder cualidades tales como textura, sabor y olor, no supone una amenaza para la salud humana.
Ajustar las raciones al número de comensales y aprovechar las sobras constituyen también gestos a incorporar a la vida cotidiana para sacarle el mayor provecho a la comida. Y para la parte orgánica no comestible, el compostaje se erige en una magnífica opción al ponerla en valor mediante su transformación en un abono con excelentes propiedades fertilizantes para el suelo.
A fin de asesorar a la comunidad educativa en el aprovechamiento de los alimentos y minimizar la cantidad de comida que acaba arrojada al cubo de la basura, educadores de Sogama se trasladarán a este centro el próximo 17 de octubre para impartir una sesión formativa en la que, además de esta temática, abordarán el principio de las tres erres (reducir, reutilizar y reciclar), la actividad industrial de Sogama y la contaminación por plásticos, un preocupante problema al que Europa ya está poniendo coto al haber prohibido los plásticos de usar y tirar a partir del año 2021.
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