- Una economía circular reducirá las emisiones de CO2, al tiempo que estimulará el crecimiento económico y creará oportunidades de empleo.
- Si seguimos explotando los recursos, que son finitos, en 2050 necesitaremos tres planetas Tierra.
- Se requiere pasar de una sociedad lineal, definida por las malas prácticas de usar y tirar, a una circular y neutra en carbono, ambientalmente sostenible y libre de tóxicos.
Cerceda, a 8 de febrero de 2021.-En el marco del Pacto Verde y, en línea con el objetivo de neutralidad climática de la UE para 2050, la Comisión Europea propuso, en marzo de 2020, un nuevo Plan de Acción de Economía Circular centrado en la prevención y gestión de residuos, y destinado a impulsar el crecimiento, la competitividad y el liderazgo mundial de la UE en este campo.
Si seguimos explotando los recursos, que son finitos, en 2050 necesitaremos tres planetas Tierra. Se requiere pasar de una sociedad lineal, definida por las malas prácticas de usar y tirar, a una circular y neutra en carbono, ambientalmente sostenible, libre de tóxicos.
La crisis actual evidenció las debilidades en los recursos y en las cadenas de valor, impactando en las pymes y la industria. Una economía circular reducirá las emisiones de CO2, al tiempo que estimulará el crecimiento económico y creará oportunidades de empleo.
El 27 de enero, la comisión de Medio Ambiente respaldó el plan y pidió objetivos vinculantes para 2030 en el uso y consumo de materiales.
Para lograr un mercado europeo de productos sostenibles, climáticamente neutros y eficientes en el uso de recursos, la Comisión propone extender la directiva sobre diseño ecológico a aquellos no relacionados con la energía. Los eurodiputados quieren que las nuevas normas estén vigentes este mismo año.
Los miembros del Parlamento también respaldan iniciativas para luchar contra la obsolescencia programada, mejorar la durabilidad y la capacidad de reparación de los productos, así como la protección de los consumidores con el "derecho a reparar".
TRANSFORMAR LOS SECTORES ESENCIALES EN CIRCULARES
Tanto la circularidad como la sostenibilidad deben incorporarse en todas las etapas de las cadenas de valor para lograr una economía completamente circular: desde el diseño hasta la producción y el consumo.
El plan de acción de la CE establece siete áreas clave esenciales para lograr una economía circular: plásticos, textiles, residuos electrónicos, alimentos; agua y nutrientes, embalaje, baterías y vehículos; edificaciones y construcción.
Los eurodiputados respaldan la estrategia europea para el plástico en una economía circular que eliminaría gradualmente el uso de microplásticos.
Los textiles utilizan mucha materia prima y agua, con menos de un 1% de reciclaje. Los eurodiputados reclaman nuevas medidas contra la pérdida de microfibras y normas más estrictas sobre el uso del agua.
Asimismo, se estima que el 20% del total de alimentos producidos se pierde o desperdicia en la UE. Los europarlamentarios instan a reducir a la mitad el desperdicio de comida de cara a 2030 en el marco de la “Estrategia de la granja a la mesa”.
Los desechos electrónicos y eléctricos son el flujo de más rápido crecimiento en la UE y menos del 40% se recicla. Los eurodiputados quieren que la UE promueva una vida útil más larga del producto mediante la reutilización y la reparabilidad.
Los residuos de envases alcanzaron un récord en 2017 a nivel europeo. Las nuevas normas tienen como objetivo garantizar que todos los embalajes presentes en el mercado de la UE sean económicamente reutilizables o reciclables para 2030.
Los eurodiputados están estudiando propuestas que exijan que la producción y los materiales de todas las baterías en el mercado de la UE tengan una huella baja en carbono y respeten los derechos humanos, así como los estándares sociales y ecológicos.
La construcción representa más del 35% del total de residuos de la UE. Los miembros del PE piden que se aumente la vida útil de los edificios, junto a objetivos de reducción de la huella de carbono con respecto a los materiales y requisitos mínimos sobre los recursos y eficiencia energética.
Fuente: Parlamento Europeo
Imagen: Pexels