- Según un informe de la AEMA, tres vías principales pueden hacer que la producción y el consumo de plásticos sean más sostenibles: un uso más inteligente de los mismos, una mayor circularidad y más materiales renovables
Cerceda, a 28 de marzo de 2023.- Si bien los plásticos tienen muchas aplicaciones útiles, lo cierto es que las tendencias mundiales de su producción y consumo son actualmente insostenibles. Es por ello que las prácticas circulares y de sostenibilidad a lo largo del ciclo de vida de estos materiales pueden ayudar a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, la contaminación y los residuos.
Según un nuevo análisis de la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA), ya existen muchos ejemplos de buenas prácticas que deberían ampliarse para hacer posible una economía circular de los plásticos en Europa. Así, el informe “Caminos hacia plásticos circulares en Europa -ejemplos de buenas prácticas de países, empresas y ciudadanos”, pretende servir de inspiración a empresas, responsables políticos y ciudadanía en general para que la producción y el consumo de plásticos sean más circulares y sostenibles. Según el documento de la AEMA, tres vías principales pueden hacerlo posible: un uso más inteligente de los plásticos, disminuyendo los envases innecesarios y artículos de un solo uso; una mayor circularidad, propiciando que los productos duren más y sean más fáciles de reutilizar y reparar; y más materiales renovables.
Para aumentar la circularidad es necesario prolongar el uso y la reutilización de los productos, y mejorar la recogida, la clasificación y el reciclado de los plásticos. Algunos ejemplos de buenas prácticas son las tiendas que se ofrecen a recuperar sus propios productos al final de su ciclo de vida, lo que puede mejorar la calidad de los materiales reciclados o permitir algún tipo de reutilización. El papel de los consumidores también es fundamental a la hora de elegir qué comprar y garantizar un reciclado adecuado.
Aumentar el uso de materiales renovables implica, por ejemplo, utilizar más plásticos reciclables y de base biológica, en lugar de depender únicamente de los combustibles fósiles y sus importaciones.
Tal y como manifiesta la AEMA, existe un gran potencial para ampliar los modelos de negocio circulares, reforzar las políticas, reducir el consumo innecesario y mejorar el reciclaje.
Fuente: Residuos Profesional
Imagen: Pixabay