- Más del 30% de la huella ambiental de la UE proviene de los edificios, lo que lo convierte en el sector con mayor impacto sobre el medio ambiente
- Aproximadamente un tercio del consumo de materiales de la Unión se destina a la construcción, representando el uso de los edificios el 42% del consumo total de energía y el 35% de las emisiones de GEI
Cerceda, a 2 de octubre de 2024.- Si bien la construcción, el uso y la demolición de edificios generan importantes presiones ambientales y climáticas, según un reciente informe de la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA), las renovaciones inteligentes que se centran en el uso eficiente de la energía y los recursos pueden ayudar a Europa a aumentar la sostenibilidad de su sector inmobiliario
El documento, que lleva por título " Abordar la huella ambiental y climática de los edificios", evalúa el estado actual del parque inmobiliario europeo y analiza lo que se necesita para que los edificios sean más sostenibles. La renovación de los existentes con materiales sostenibles, al tiempo que se mejora la resiliencia climática y se trabaja con la naturaleza, son fundamentales.
Más del 30% de la huella ambiental de la UE proviene de los edificios, lo que lo convierte en el sector con mayor impacto sobre el entorno. Aproximadamente un tercio del consumo de materiales de la Unión se destina a la construcción, representando el uso de los edificios el 42% del consumo total de energía y el 35% de las emisiones de gases de efecto invernadero. Además, su desmantelamiento genera el mayor flujo de residuos en la UE en términos de peso, y, aunque las tasas de reciclaje de los residuos de demolición son altas, conducen principalmente a un reciclaje de bajo valor.
El informe de la AEMA señala que se espera que el envejecimiento de la población, el aumento de la riqueza y el cambio climático modifiquen la demanda de usos específicos de los edificios en Europa. Es probable que se necesiten más edificios en las ciudades, debiendo contribuir éstos a las soluciones medioambientales y climáticas, incluido el ahorro y la producción de energía, la protección contra los riesgos climáticos y la recuperación de la naturaleza.
Fuente e imagen: AEMA