- Tiene por objeto alertar sobre las consecuencias medioambientales de esta mala praxis.
- Uno de los principales inconvenientes se encuentra en el hecho de que casi todos los productos higiénicos contienen plástico, que tarda siglos en descomponerse, suponiendo igualmente una amenaza para la fauna
- Los motivos por los que los ciudadanos se deshacen de forma indebida de este tipo de residuos se debe, por una parte, a la falta de información y de instalaciones suficientes y, por otra, a la falta de concienciación y civismo.
Cerceda, a 4 de diciembre de 2019.- Múltiples productos sanitarios o destinados a la higiene personal (tollitas húmedas, lentillas, bastoncillos para los oídos, compresas, tampones, preservativos, etc), terminan diariamente abandonados en la naturaleza o en el inodoro, ocasionando un grave impacto ambiental.
El Proyecto LIBERA, promovido por SEO/BirdLife y Ecoembes, ha lanzado una nueva campaña de sensibilización para alertar sobre esta mala praxis. Bajo la denominación ‘La Criatura’, esta iniciativa va acompañada del informe “Tirando de la cadena de la higiene personal: la naturaleza como retrete; del retrete al entorno”, donde se citan diversos estudios en los que se recogen datos sobre la incidencia e impacto de este problema creciente, al tiempo que propone algunas soluciones.
Uno de los principales inconvenientes se encuentra en el hecho de que casi todos los productos higiénicos contienen plástico, que tarda siglos en descomponerse, suponiendo igualmente una amenaza para la fauna, bien por enredo o ingesta. Además, estos plásticos acaban fragmentándose, dando lugar a los microplásticos, partículas de menos de 5mm que no son solubles en agua y cuya persistencia en los entornos naturales es muy elevada.
Los motivos por los que los ciudadanos se deshacen de forma indebida de este tipo de residuos se debe, por una parte, a la falta de información y de instalaciones suficientes y, por otra, a la falta de concienciación y civismo.
Según un informe de la Comisión Europea de 2016, de entre todos los objetos que se tiran inadecuadamente por el inodoro, los más comunes son los utilizados en el cuarto de baño: bastoncillos de algodón, compresas, tampones y sus aplicadores de plástico y preservativos. Entre estos productos se encuentran también las toallitas húmedas. Según la Asociación Española de Abastecimientos de Agua y Saneamiento (AEAS), cada español utiliza al año más de 15 kg.
Este alto consumo y el hecho de tirarlos por el inodoro implica que la red de alcantarillado también se vea afectada. Se estima que, cada día, se desechan 70.000 salvaslips, 2,5 millones de tampones y 1,4 millones de compresas según estudios realizados en Reino Unido.
POSIBLES SOLUCIONES
El informe recoge una batería de soluciones a varios niveles. Por un lado, alude a las organizaciones ambientales, que deben diseñar y ejecutar acciones de sensibilización y concienciación dirigidas a toda la ciudadanía, resultando primordial la obtención de dados para definir la aplicación de medidas.
A nivel individual, es preciso que los ciudadanos adquieran nuevos hábitos preventivos mediante consumo responsable.
En el caso de las instituciones públicas, éstas pueden aportar información y fomentar la concienciación necesaria a través de campañas de sensibilización, velando igualmente por un sistema de depuración de aguas efectivo y eficiente que impida que los residuos arrojados por el váter acaben en la naturaleza.
El sector turístico tiene que realizar una importante labor de información y sensibilización hacia el turista y, el industrial, promover la innovación y el ecodiseño de los productos de consumo doméstico.
Fuente e imagen: Ecoembes
Saludos, Departamento de Comunicación