- Tal y como asegura The Global E-waste Monitor 2020, esto abre múltiples oportunidades para aprovechar el potencial de los desechos electrónicos en una economía circular.
- Si cambiamos hábitos y diseñamos los dispositivos para facilitar su reciclaje, podrían llegar a ser una fuente importante de materia prima en el futuro.
Cerceda, a 16 de noviembre de 2021.- Los equipos eléctricos y electrónicos se han convertido en una parte esencial de nuestra vida y su producción no para de crecer. Más allá de la necesidad de gestionar correctamente estos residuos por el riesgo que entrañan para el medio ambiente debido a su contenido en materiales tóxicos (por ejemplo, los electrodomésticos de gama blanca, como neveras y aparatos de aire acondicionado, liberan gases nocivos cuando no se eliminan de manera responsable), también se pueden encontrar en los mismos metales preciosos (oro, plata, cobre, platino...), materias primas críticas (cobalto, paladio, indio, antimonio...) y metales no críticos, como el aluminio y el hierro.
Tal y como asegura The Global E-waste Monitor 2020, esto abre múltiples oportunidades para aprovechar el potencial de los desechos electrónicos en una economía circular, pudiendo considerarse como una nueva mina. Si cambiamos hábitos y diseñamos los dispositivos para facilitar su reciclado, podrían llegar a ser una fuente importante de materia prima en el futuro.
Asimismo, se requiere la adopción de medidas urgentes para minimizar los efectos de esta inevitable avalancha, que deben ir encaminadas a solucionar el problema de forma coordinada y deben involucrar a ciudadanos, empresas y organismos públicos.
Como dijo el conocido emprendedor social y del reciclaje, Eric Lundgren: “Nuestra sociedad está destruyendo baterías utilizables cuando debería estar creando aplicaciones de segunda vida. No deberíamos estar destruyendo baterías que podrían reutilizarse durante otros 10 años”.
Reutilizar implica alargar la vida útil de los productos eléctricos y electrónicos. Por ejemplo, ofertándolos en el mercado de segunda mano. Fruto de este principio han nacido startups como la alemana Grover, una plataforma de alquiler de tecnología que busca reducir la cantidad de desechos electrónicos y promover la reutilización de artículos electrónicos a un precio asequible; o iniciativas como la de la ONG Fundación Adelias, que, con su campaña '¡Ni un niño sin ordenador!', pretende que todos los niños puedan aprovecharse de las ventajas de las nuevas tecnologías.
En el ámbito del reciclaje, también hay iniciativas interesantes como EWASTE, nacida con la idea de generar una industria que favorezca el cierre del ciclo de residuos. Ellos pusieron en marcha la primera planta de tratamiento de RAEE de Canarias, considerada una de las más modernas y avanzadas de Europa al alcanzar un porcentaje de descontaminación del 99,8% de los gases de efecto invernadero.
Fuente: Gestores de Residuos
Imagen: Pexels