- En un documento publicado recientemente bajo el título “Trabajar con el medio ambiente para proteger a las personas”, expone cómo está ajustando su trabajo para apoyar a las naciones y sus aliados a "reconstruir mejor" tras la crisis del coronavirus.
- Con tal fin, considera que resulta esencial un conocimiento científico más sólido, políticas que velen por un planeta saludable y más inversiones verdes.
Cerceda, a 26 de mayo de 2020.- El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) está intensificando su trabajo en la identificación de las amenazas zoonóticas y la protección de la naturaleza con el fin de reducir el riesgo de pandemias como la de COVID-19.
En un documento publicado recientemente bajo el título “Trabajar con el medio ambiente para proteger a las personas”, el PNUMA expone cómo está ajustando su labor para ayudar a las naciones y sus aliados a "reconstruir mejor" tras la crisis del coronavirus, resultando esencial un conocimiento científico más sólido, políticas que velen por un planeta saludable y más inversiones verdes.
Su plan de acción se centrará en cuatro áreas: mejorar la gestión de los residuos en el marco del Covid-19, impulsar una transformación profunda en favor de la naturaleza y las personas, propiciar que los paquetes de recuperación económica creen resiliencia ante futuras crisis y modernizar la gobernanza ambiental global.
En este escenario, la directora ejecutiva del PNUMA, Inger Andersen, manifestó que "con la COVID-19, el planeta nos ha enviado un mensaje de advertencia muy fuerte: la humanidad tiene que reinventar su relación con la naturaleza", añadiendo que “construir economías que trabajen junto con la naturaleza será fundamental para garantizar la prosperidad de las naciones"
Para llevar a cabo esta ambiciosa tarea, el PNUMA coordinará su trabajo con el sistema de las Naciones Unidas. Algunos ejemplos de sus intervenciones son las siguientes:
- Apoyar a los responsables de la toma de decisiones para hacer frente al aumento de los desechos peligrosos tales como equipos de protección personal, aparatos electrónicos y fármacos, a fin de evitar su negativo impacto sobre el medio ambiente y la salud humana.
- Un programa de respuesta y riesgo zoonótico con el fin de mejorar la capacidad de los países para reducir las amenazas a través de enfoques positivos para la naturaleza, incluyendo un nuevo análisis global de los riesgos del comercio no regulado de vida silvestre, la fragmentación de hábitats y la pérdida de biodiversidad.
- Promover mayores oportunidades para invertir en la naturaleza y la sostenibilidad.
- Trabajar con los actores económicos para reconstruir, ampliar y acelerar el consumo y la producción sostenibles, y crear nuevos empleos verdes.
- Revisar las implicaciones de trasladar las actividades y reuniones de la gobernanza y el multilateralismo ambiental hacia plataformas virtuales, con una menor huella ambiental.
A juicio de Andersen “el PNUMA debe brindar aún más apoyo a los países en sus esfuerzos para reducir los riesgos de futuras pandemias por medio de la restauración de los ecosistemas y la biodiversidad, la lucha contra el cambio climático y la reducción de la contaminación".
Fuente: ONU Medio Ambiente
Imagen: Pixabay