- Científicos del Laboratorio Nacional Lawrence Berkley del Departamento de Energía de Estados Unidos, han gestado un plástico de última generación que podría reciclarse múltiples veces y convertirse en nuevos materiales.
- A modo de juego de Lego, se desmontaría en sus partes constituyentes a nivel molecular y se volvería a ensamblar en una forma, textura y color diferentes, una y otra vez, sin pérdida de cualidades ni rendimiento.
- Este hallazgo abre la puerta a la concepción de plástico circular cuyos monómeros originales pueden recuperarse para su reutilización durante el mayor tiempo posible o bien reciclarse para hacer un nuevo producto de mayor calidad.
Cerceda, a 23 de mayo de 2019.- Dado el complejo proceso de reciclado de algunas tipologías de plásticos debido a su composición (aditivos, colorantes, rellenos o retardadores de llama), científicos del Laboratorio Nacional Lawrence Berkley del Departamento de Energía de Estados Unidos, han gestado un plástico de última generación que podría reciclarse múltiples veces y convertirse en nuevos materiales de diferentes formas y colores.
El plástico reciclable, concebido como un juego de Lego, podría desmontarse en sus partes constituyentes a nivel molecular y volverse a ensamblar en una forma, textura y color diferentes, una y otra vez, sin pérdida de cualidades ni rendimiento. De este nuevo material, denominado pol (dicetoenamina) o PDK, se hizo eco la revista Nature Chemistry.
Los plásticos están formados por moléculas grandes llamadas polímeros que se componen de unidades repetitivas de compuestos más cortos que contienen carbono, que son los monómeros. A juicio de los investigadores, el problema que atañe a muchos plásticos es que los productos químicos agregados para hacerlos útiles, como son los rellenos que los dotan de dureza o los plastificantes que les dan flexibilidad, están estrechamente unidos a los monómeros y permanecen en el plástico después de ser recuperados.
A diferencia de los plásticos convencionales, los monómeros PDK podrían recuperarse y liberarse de cualquier aditivo compuesto sumergiendo el material en una solución altamente ácida. El ácido ayuda a romper los enlaces entre los monómeros y los separa de los aditivos químicos que dan apariencia y sensación al plástico.
Los investigadores señalan que los monómeros PDK recuperados pueden transformarse en polímeros y éstos formar nuevos materiales plásticos sin heredar el color u otras características del material original.
Este hallazgo abre la puerta a la concepción de plástico circular cuyos monómeros originales pueden recuperarse para su reutilización durante el mayor tiempo posible o bien reciclarse para hacer un nuevo producto de mayor calidad.
Los investigadores también han planteado desarrollar plásticos PDK con una amplia gama de propiedades térmicas y mecánicas para aplicaciones tan diversas como textiles, impresión 3D y espuma, buscando igualmente expandir las formulaciones incorporando materiales de origen vegetal y otras fuentes sostenibles.
Fundado en 1931, los científicos del Laboratorio Nacional Lawrence Berkeley fueron reconocidos con distintos premios.
Fuente: Berkeley Lab
Imagen: Pixabay
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