- Este dato se enmarca en la encuesta sobre el clima 2022-2023 del Banco Europeo de Inversiones, que explora el comportamiento individual ciudadano frente a medidas para combatir el cambio climático
Cerceda, a 11 de septiembre de 2023.- El cambio climático continúa siendo el tercer reto más importante para el país, después de los problemas económicos y el empleo. Este dato se incluye en la segunda parte de la encuesta sobre el clima 2022-2023 del Banco Europeo de Inversiones (BEI), que explora el comportamiento individual de los ciudadanos y las medidas que están adoptando para combatir el cambio climático.
El 80 % de los encuestados, es decir, 8 puntos porcentuales por encima de la media de la UE, dicen estar convencidos de que su propio comportamiento puede marcar una diferencia a la hora de hacer frente a la emergencia climática. La mayoría de los españoles (74 %) se muestra a favor de medidas gubernamentales más estrictas que impongan un cambio en el comportamiento de la gente para hacer frente al cambio climático. También una mayoría (59 %) se declara favorable a un sistema de presupuesto de carbono que asigne a cada persona un número fijo de créditos anuales para gastar en artículos con una huella de carbono elevada (bienes no esenciales, vuelos, carne, etc.). Esta opinión es compartida casi en la misma proporción por los franceses (57 %) y por un porcentaje mayor de portugueses e italianos (más del 68 % y el 64 % respectivamente).
Asimismo, las consideraciones climáticas a la hora de elegir un empleador van ganando terreno entre las personas que se incorporan cada año al mercado de trabajo. El 74 % de la población española afirma que es importante que su futuro empleador dé prioridad a la sostenibilidad y, para el 21 % de los demandantes de empleo, es incluso una prioridad absoluta.
La producción de alimentos genera una parte importante de las emisiones de gases de efecto invernadero. Para ayudar a los ciudadanos a tomar decisiones más sostenibles a la hora de hacer la compra, el 84 % manifiesta estar a favor de etiquetar todos los productos alimentarios para identificar su huella climática. Este porcentaje es similar a la de Francia (83 %), pero 6 puntos porcentuales inferior al de Portugal (90 %).
Además, el 66 % de los españoles afirma que estaría dispuesto a pagar algo más por alimentos producidos localmente y de forma más sostenible (porcentaje similar al de los portugueses, con un 67 %, pero 6 puntos porcentuales por encima de los franceses, con un 60 %).
Reducir el consumo de carne y productos lácteos se contempla como otra forma de limitar las emisiones de gases de efecto invernadero. En este punto, los españoles están divididos, con un 50 % a favor (7 puntos porcentuales por debajo de los portugueses y franceses).
Fuente: Banco Europeo de Inversiones
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