- Editorial del presidente de Sogama correspondiente a la Newsletter corporativa del presente mes de septiembre https://www.sogama.gal/sites/default/files/newsletter/2022/09/Newsletter...
El pasado 7 de junio, 48 horas después de la conmemoración del Día Mundial del Medio Ambiente, Sogama celebraba su 30 aniversario y lo hacía rodeada de sus más allegados (representantes políticos, empresariales, sociales, educativos, medios de comunicación y trabajadores). Se trataba de un humilde evento con una gran carga histórica, humana y emocional, ya que no debe olvidarse que ha sido la labor, la ilusión, el entusiasmo y el buen hacer de todos los que han conformado esta entidad pública en cada momento, los que la han hecho grande; una grandeza que ha conseguido colocarla en el pódium europeo de las plantas de gestión y tratamiento de residuos más eficientes del continente y modelo a seguir por otros países del entorno comunitario y resto del mundo.
Sogama es, de por sí, un claro ejemplo de la política ambiental de la Xunta de Galicia. El riguroso cumplimiento de la ley, el control y vigilancia de su cometido, y el esfuerzo incansable para cuidar y proteger día tras día el medio ambiente y la salud de las personas, constituyen las principales razones que guían su actividad; un esfuerzo que no solo entiende de presente, sino que constituye una inversión de futuro para que las próximas generaciones puedan disfrutar de un digno bienestar y una mayor calidad de vida.
Desde aquel mes de abril de 1992, fecha en la que se creó Sogama, han transcurrido, nada más y nada menos, que 30 años en los que la gestión de los residuos urbanos en nuestra comunidad se ha visto transformada en su integridad. De un sistema asentado prioritariamente en el vertedero, hemos evolucionado hacia el que, desde hace años, ha primado en los países europeos más desarrollados y comprometidos con el medio ambiente, y que no es otro que aquél que pivota sobre la aplicación del principio de las tres erres (reducción, reutilización y reciclaje), complementado con la recuperación energética de la parte no reciclable. Con ello se consigue relegar el vertido, la peor de las opciones, a mínimos.
Y esta gestión, que bien podría calificarse de pura sensatez, choca con los posicionamientos de determinados grupos políticos y/o ecologistas, utilizando para ello un discurso anclado en la década de los 90 que recomendamos actualizar, pues resulta paradójico e incomprensible que rechacen la transformación de los residuos no reciclables en energía eléctrica, un bien extraordinariamente valioso, y más aún en el actual escenario de crisis energética, y no cuestionen que el potencial energético de los desechos acabe enterrado en un vertedero, con el consiguiente riesgo ambiental.
Todavía queda mucha tarea por delante, pero es irrefutable que, a pesar de las circunstancias, hemos conseguido que una buena parte de la población conozca la realidad de Sogama sin filtros y con total transparencia.
El permanente aval y apoyo de la Unión Europea, la confianza depositada en el sistema por parte de los 295 ayuntamientos gallegos que utilizan los servicios de esta compañía, el compromiso y profesionalidad de todos sus trabajadores, la firme apuesta por la innovación industrial y los recursos invertidos en educación ambiental, han hecho posible que Sogama sea mucho más que una planta de tratamiento de residuos. Por encima de todo, es la Sociedade Galega do Medio Ambiente.
Presidente ejecutivo
Javier Domínguez Lino