- Life EPS-SURE ha culminado con éxito un innovador proceso de reciclado que abre la puerta a nuevos desarrollos y sienta las bases para la autorización y certificación de grado alimentario para el poliestireno reciclado procedente de la caja de pescado (r-PS) por parte de la agencia europea EFSA.
- El proyecto contribuirá de forma significativa a la economía circular, evitando en un futuro que estos residuos acaben en vertedero o sean abandonados en el entorno (littering).
Cerceda, a 11 de agosto de 2020.- Tras tres años de investigación, el proyecto Life EPS-SURE ha culminado con éxito un innovador proceso de reciclado al transformar las cajas de poliestireno expandido (EPS), conocidas como corcho blanco, y que se utilizan como envase para almacenar, transportar y presentar productos frescos tales como el pescado, en nuevos envases de PS aptos para contacto con alimentos, como el envase de yogur.
Las pruebas realizadas sobre el proceso de tratamiento para alcanzar el r-PS mediante un challenge test, utilizando criterios similares a los usados para PET aprobados por la EFSA, demuestran la eficiencia de la descontaminación para el uso final de lámina en la fabricación de envases para productos lácteos, pudiéndose usar 100% de material reciclado, r-PS, para ese fin, toda vez que cumple con la normativa europea de referencia para contacto alimentario.
Asimismo, los test sensoriales organolépticos han sido superados ampliamente, no habiéndose detectado alteraciones debido a la posible presencia residual de aminas altamente odorantes que genera el pescado. En consecuencia, queda demostrado que los envases obtenidos de r-PS serían, por tanto, inocuos y seguros para su uso en aplicaciones de contacto alimentario, además de producir un gran beneficio ambiental.
Los procesos de las distintas fases han sido evaluados con la colaboración del centro tecnológico Aimplas y, gracias a la posible apertura futura de nuevos mercados de materiales reciclados con calidad contacto alimentario, Life EPS-SURE contribuirá de forma significativa a la economía circular, evitando en un futuro que estos residuos acaben en vertedero o sean abandonados en el entorno (littering).
La viabilidad técnica del proyecto abre la puerta a nuevos desarrollos y sienta las bases para la autorización y certificación de grado alimentario para el poliestireno reciclado procedente de la caja de pescado (r-PS) por parte de la agencia europea EFSA.
El consorcio formado por las empresas Cicloplast, Anape, Coexpan, El Corte Inglés y Total Petrochemicals Ibérica presentó el pasado mes de junio los resultados de esta iniciativa en un evento online que contó con la asistencia de representantes europeos de sectores tales como el de administraciones públicas, envasadores de grandes marcas, distribuidores del sector comercial, industriales del sector plástico, recicladores y asociaciones y cofradías del sector de la pesca, entre otros.
Fuente e imagen: Gestores de Residuos